Quien siga de cerca el mundo del vino, debe estar fascinando con la capacidad de las bodegas para lanzar nuevas etiquetas al mercado. Y pese a que lo nuevo es un argumento periodístico de primer orden, nos gusta seguir de cerca a quien lo lleva haciendo bien desde hace tiempo y representa un valor seguro. Uno de los más destacados en la Ribera del Duero es Bodegas Hnos. Pérez Pascuas.
No es sólo una casa de referencia y de trayectoria impecable en esta región. También fue una de la decena de firmas que fundaron la denominación en 1982. Los hermanos Pérez Pascuas, Benjamín, Manuel y Adolfo, habían creado su bodega dos años antes, en 1980, convencidos de las enormes posibilidades del viñedo familiar plantado por su padre Mauro. En el vídeo, José Manuel Pérez Ovejas, actual responsable enológico de la firma, habla de una tradición de viticultores sabios que llevaron su apellido y les precedieron en el trabajo de una viña que se ha ido ampliando a lo largo de los años hasta alcanzar las 135 hectáreas.
Como es habitual en la Ribera, casi todo tinto fino (tempranillo) y con una alto porcentaje de cepas de 25 años que aseguran una notable consistencia a sus mejores tintos.
La bodega se puede visitar (y esto es algo que realmente merece la pena) en el municipio burgalés dePedrosa de Duero, cuyo nombre ha inspirado su marca más conocida, Viña Pedrosa, que se elabora en versión de crianza, reserva y un muy escaso gran reserva.
El Viña Pedrosa Crianza (unos 15 euros) es el gran buque insignia de la casa, muy recomendable en la excelente cosecha 2009 en la que se perfila complejo, potente y con una capacidad de desarrollo en botella superior a lo que suele ser habitual en esta categoría. El Viña Pedrosa Reserva (unos 27 euros) que se encuentra ahora mismo en el mercado es la cosecha 2007, quizás algo menos estructurada de lo habitual, pero muy elegante y equilibrada y con la acidez actuando como columna vertebral del vino. Como no se elaboraron los tops de la bodega en esta añada, se benefició además de las mejores uvas y pagos de la casa. Es un tinto de grandes ocasiones, al que no le va mal la decantación y con larga vida por delante.
Otra etiqueta muy recomendable es Cepa Gavilán (por debajo de nueve euros), un excelente vino de entrada a la Ribera del Duero y un clásico de la relación calidad-precio en la zona que, a diferencia de otras propuestas que se han puesto de moda en los últimos años, tiene el mismo tiempo de envejcimiento en barrica que se le exige a un crianza. En la cosecha 2009 esos 12 meses se hacen evidentes en el perfil tostado que aparece en nariz. Hay también fruta negra y buena consistencia en boca, a tono con la potencia y la madurez frutal de la añada. Estos tres vinos tan representativos de la casa conforman la selección del Club Todovino de febrero.
La bodega también elabora un tinto de pago con el nombre del viñedo del que procede, La Navilla, excelente y muy recomendable en la cosecha 2007, y el top que sólo se elabora en las mejores añadas y que está por encima de los 100 euros Pérez Pascuas Gran Selección Gran Reserva, que juega en la liga de los mejores vinos de la Ribera y del país.
En general, los tintos de la familia Pérez Pascuas se han ganado una merecida reputación por su capacidad de evolucionar en botella y de aguantar el paso del tiempo. Representan una Ribera clásica, con potencia, pero sin excesos y especialmente interesada por el equilibrio y por la elegancia.